En el Mercado de Maravillas, ubicado en la calle Bravo Murillo de Madrid, se observa una mezcla de puestos de mariscos, abarrotados en estos días, junto con los de comida latinoamericana. Este fenómeno refleja la transformación en este barrio obrero, con una creciente población inmigrante. Similarmente, en el Mercado de la Boquería, en las Ramblas de Barcelona, los residentes luchan por encontrar productos para las festividades entre la multitud de turistas que convierten este lugar en uno de los más concurridos de la ciudad. Mientras tanto, en el Mercado de Triana, en Sevilla, los comerciantes comparten alegría y canciones navideñas en un pequeño tablao flamenco entre sus puestos. Estos son solo ejemplos que ilustran las dinámicas cambiantes en los mercados de abastos españoles, lugares que no solo reflejan cambios alimenticios, sino también sociales.
Estos mercados a menudo reciben una gran atención mediática en dos momentos distintos: durante las campañas electorales, donde los candidatos buscan popularidad entre comerciantes y clientes tradicionales, y durante la Navidad, cuando se destaca la subida de precios y aumenta la afluencia de clientes en busca de productos especiales para celebraciones familiares. Sin embargo, más allá de estos momentos, los mercados de abastos enfrentan una realidad más compleja, marcada por el abandono debido a la falta de inversiones públicas, especialmente municipales, para su modernización. Además, se observa un cambio en el uso de estas instalaciones, ya que algunos residentes (y turistas) buscan convertir los puestos en bares con alimentos locales. Muchos mercados tradicionales han experimentado un declive, mientras otros exploran nuevas formas de adaptarse a clientes y modalidades de consumo cambiantes, como la apertura los fines de semana o el debate sobre abrir por las tardes para satisfacer a las familias que trabajan por la mañana.
Actualmente, los mercados de abastos representan aproximadamente el 15% del sector de alimentación fresca, con una facturación anual de 15,000 millones de euros. En 2019, un grupo de comerciantes firmó un manifiesto por la unidad del sector en el Mercado de La Boquería, y en 2020 nació la Confederación de Mercados Tradicionales y de Abastos (Metrae). Esta organización, que ha crecido en socios y representación ante la administración pública, busca abordar los desafíos del sector. Según información de Metrae, en España hay identificados 958 mercados, con alrededor de 47,000 puntos de venta y más de 140,000 puestos de trabajo directos. La región con más mercados es Andalucía, seguida de Cataluña y la Comunidad Valenciana. Metrae, que representa a 6,000 puntos de venta de 130 mercados en 12 comunidades autónomas, busca la unidad del sector y apoyo de las administraciones para superar los desafíos actuales.
El presidente de Metrae, Asier Beato, propietario de la panadería Rosi en el Mercado de la Ribera de Bilbao, destaca el desafío principal de los mercados españoles: adaptarse a los grandes cambios sociales y a distintos públicos. Señala las diferencias entre mercados como La Boquería, con un flujo constante de turistas, y el mercado sevillano del Tiro de Línea, con clientes más tradicionales y mayores que buscan servicios a domicilio y precios más claros.
Fuente y noticia completa: https://www.elconfidencial.com/espana/andalucia/2024-01-01/espana-vuelve-al-mercado-por-navidad_3802895/
